Para esta manualidad vamos a necesitar:
- Un brick de leche.
- Botes de pintura de diferentes colores.
- Cinta adhesiva del color que vayamos a emplear.
- Algún dibujo en papel (A elección).
- Tijeras.
- Pinceles y agua.
- Pegamento.
En primer lugar cortaremos un poco menos de la mitad del brick, la parte del tapón tiene que ser más pequeña y, una vez cortada, se tirará. Cuando tengamos la otra mitad del cartón, lo limpiaremos bien y procederemos a pintarlo del color que el niño/a haya elegido.
Cuando esté pintado y secó el cartón, pondremos un poco de cinta adhesiva en los bordes superiores, para asegurar el borde, corregir los cortes de la tijera y prevenir algún posible corte con el mismo.
Cuando la pintura esté seca, los niños podrán decidir si pintar algún dibujo en el cartón o, al contrario, pintar un dibujo en folio o cartulina y pegarlo luego al brick. También pueden usar goma eva, pegatinas, o todo lo que se les ocurra que pueda ser decorativo.
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